El hotel era un sitio estupendo para, además gozaba de una zona peatonal, justo al lado del centro histórico, de muchos restaurantes agradables y también del mismísimo centro de la ciudad. Un personal servicial, habitaciones bellamente decoradas y muy bien amuebladas, en el segundo piso. Había una zona de estar y una mesa de trabajo cuando llegamos.

La habitación recién decorada con chimenea nos encantó, con ducha y secador de pelo, y la ubicación perfecta cerca del Museo del diseño de la ciudad.

Una habitación recién decorada, el hotel en sí romántico y un personal bueno. Ubicación: el hotel estaba super cerca del puente, de los canales.

La habitación enorme y bien decorada. Desayuno completo y delicioso.Dueños amables y serviciales.Buena ubicación cerca del centro.

Todo fue fantástico.

El hotel está muy bien situado a 3 minutos del centro, al lado del puente Sint-Michielshelling.Muy limpio y comodo.El desayuno completísimo, te hacen el zumo natural en el momento y te ponen toda clase de quesos, panes, tés... .La junior suite tiene dos alturas, abajo está el salón, la cocina y el baño y arriba la habitación.En conclusión un hotel super recomendable.

Que te tienes que quitar los zapatos al entrar y las zapatillas que te dan para moverte por el hotel cuando vas a salir no tienes un sitio fijo donde dejarlas y cuando regresas al hotel pueden que ya no están las tuyas.

La atencion del personal

El desayuno algo mas triste.

Nos alojamos en una junior suite en un hotel muy cercano al centro histórico de la ciudad. La habitación era espaciosa y estaba decorada con mucho gusto, combinando lo tradicional y lo moderno. Además, la atención del personal fue excelente y el desayuno ofrecido era variado y delicioso.

Hubo un pequeño inconveniente con la limpieza del baño, ya que encontramos pelo y restos orgánicos en la taza.

ubicación, magnífico desayuno, trato y limpieza

las escaleras hasta la habitación (último piso), los lofts son un poco incómodos para ir al baño en medio de la noche

Por la ubicación,limpieza, el diseño en general y los servicios de nuestra habitación con cocina incluida.

Que no tiene ascensor (estabamos en la última planta) y la falta de privacidad a la hora del desayuno donde todos los huéspedes comparten la misma mesa

La amabilidad y cortesía de los huéspedes, la ubicación y la limpieza de las instalaciones: de primera.

Aunque me parece lógico y vas advertido por los comentarios de la página, resulta chocante que te pidan que te descalces antes de subir a las habitaciones. También resulta un poco incómodo el horario de check in.

Lo mejor es lo nuevo y bien cuidado que esta el detalle, asi como lo enormes que son las habitaciones. Tambien es importante que esta supercentrico y que el desayuno esta muy bien. Los consejos de la chica sobre restaurantes tambien fueron buenos.

Lo peor es si te toca una habitacion de las de arriba, porque no tiene ascensor y se suben y bajan muchas escaleras. No me gusta que te hagan quitarte los zapatos cuando llegas para no ensuciar.

Casa en el centro de Gantes muy acondicionada para una estancia. Diseño muy bonito y muy confortable. Amplia habitación domotizada. Desayuno correcto.

La atención muy buena, la ubicación excelente y el desayuno estupendo. Muy generoso y de muy buena calidad. La habitación es extraordinaria!

La relación calidad/precio/servicios es pésima tiene diseño pero no ofrece nada más, cualquier hotel por el mismo precio es más confortable y cuentas con todos los servicios cosa que en este no los tienes. Para dar las luces tienes como 8 ó 10 interruptores diferentes, los suelos son de baldosa en un país como bélgica, la calefacción no estaba puesta a nuestra vuelta por la noche, las camas eran individuales y no tenían la misma altura; además no hay nadie durante todo el día en caso de necesitar algo, todo esto =120€ cualquier hotel de 4* tiene un precio similar, definitivamente creo que fue un error cogerlo.

Es nuestra primera experiencia en un B&B.La habitación era muy espaciosa,luminosa,de diseño ultramoderno.Desayuno compartiendo una mesa común a el resto de huespedes.Muy céntrico.

La cama no era muy cómoda.